Mantequilla de frutos secos

Un pequeño cambio que puedes realizar para mejorar tu alimentación, y la de tu familia, es elaborar tu propia mantequilla de frutos secos y, olvidarte de una vez de las margarinas vegetales (la gran mayoría con grasas hidrogenadas y aceites de mala calidad) o mantequillas animales.

Las mantequillas de frutos secos (y también semillas) nutricionalmente hablando contienen hidratos de carbono complejos y proteínas vegetales. También son ricas en calcio, hierro y potasio, además de vitamina E y vitaminas del grupo B y, especialmente en grasas de calidad (insaturadas).

Tienes multitud de opciones a la hora de prepararla, pudiéndola hacer de un sólo sabor, o ingrediente, o combinar varios frutos secos o semillas. Te recomiendo preparar gran cantidad, ya que te aguantará perfectamente en la nevera unas 2-3 semanas.

Y, algunas os preguntaréis... ¿para qué puedo usar la mantequilla de frutos secos?

- Untada en la tostada integral, como sustituto de mantequillas y margarinas, y encima alguna fruta natural a rodajas o triturada.

- En la preparación de las bolitas energéticas y saludables.

- En sandwiches o bocadillos.

- Como snack o tentempié: dentro de un dátil (¡delicioso es poco!), sobre rodajas de manzana...

- En galletas o bizcochos.

- Como base para nuestra nutella / nocilla vegana.

- Como toppings en batidos, smoothies, pudding de chía, etc.

Consejos y trucos a la hora de prepararla:

- Los frutos secos y semillas puedes usarlos crudos o tostarlos ligeramente en la bandeja del horno a unos 150ºC unos 15 minutos. A mí me gusta alternar para beneficiarme de los nutrientes y enzimas que encontramos en los ingredientes crudos. Sin embargo, el proceso de tostado te ayudará a conseguir la mantequilla más rápidamente, ya que los aceites grasos de los frutos secos y semillas se liberan más fácilmente.

- Si puedes, utiliza una procesadora potente, ya que estará 15 minutos a máxima potencia y no queremos quemar el motor. Si no la tienes, tendrás que ir haciendo descansos en cuanto notes que se calienta y puede que se te quede un poco más espesa, pero igual de buena.

- Tritura cada vez como mínimo unas 4 tazas de frutos secos/semillas, dependiendo del tamaño de tu procesadora. Esta cantidad le ayudará a la máquina en su funcionamiento y que se triture todo mejor.

- Los ingredientes base serán los frutos secos/semillas escogidos más una pizca de sal marina/Himalaya. A partir de ahí puedes añadirle un poco de vainilla, canela, cacao u otras especias que te gusten.

- Es normal que a medida que estés triturándola se vaya calentando la mantequilla por la fricción. Esto también ayuda a la liberación de los aceites.

- Una vez esté lista, consérvala en un bote de cristal hermético dentro de la nevera, y te aguantará perfectamente de 2 a 3 semanas.

- Un último consejo: sobretodo ahora en verano, guarda tus frutos secos y semillas en la nevera para que sus aceites naturales no se enrancien (¡yo los guardo todo el año ahí!).

Fases del proceso (aprox.):

A la hora de triturar, observarás que los frutos secos y semillas pasan siempre por las mismas fases antes de llegar a la textura de la mantequilla perfecta, que es un poco líquida.

1. Durante los primeros 5 minutos, se triturarán los ingredientes a modo de harina, que se irá pegando y subiendo por las paredes de la procesadora. Ves bajándola con la ayuda de una lengua o cuchara.

2. A los 10 minutos, la harina se vuelve más pegajosa y densa, pero continúa pegándose a la procesadora.

3. A los 15 minutos, el frutos seco comienza a liberar los aceites propios, poco a poco, convirtiendo la masa densa cada vez en más líquida.

4. Si pasados los 16-18 minutos no tienes la textura semilíquida puedes, o dejarla como está y que simplemente esté un poco más densa pero de igual sabor, o añadirle una cucharada de aceite de oliva (de ppf) o aceite de coco (de ppf) y volver a triturar un par de minutos más.

Aquí os dejo algunas ideas:

- Mantequilla de cacahuete: cacahuete tostado + pizca de sal

- Mantequilla de nuez: nueces + vainilla

- Mantequilla de avellanas y cacao: avellanas tostadas + pizca sal + cacao puro en polvo + vainilla en polvo

- Mantequilla de coco y anacardos: anacardos + coco rallado + pizca sal

- Tahini: semillas de sésamo tostadas + pizca de sal